En la pericia digital, el manejo de evidencias digitales y la realización de análisis forenses requieren de seguir normas y protocolos de seguridad establecidos. Estas normas están diseñadas para garantizar la validez y fiabilidad de los resultados obtenidos en los análisis.
Uno de los estándares más reconocidos en el ámbito de la informática forense es el establecido por el NIST (National Institute of Standards and Technology). Este instituto ha desarrollado una serie de directrices y procedimientos que fijan las mejores prácticas para la realización de análisis forenses, desde la adquisición de evidencias hasta la presentación de resultados.
Además, existen otros protocolos específicos, como el de Análisis Forense de Dispositivos Móviles (AFDM), que brindan pautas detalladas para la extracción y preservación de datos en dispositivos móviles, teniendo en cuenta las particularidades y desafíos que estos presentan.
El cumplimiento de estas normas y protocolos de seguridad es esencial para garantizar la integridad de las pruebas obtenidas, su validez en los procesos judiciales y la protección de los derechos de las personas involucradas.